Etiquetas

jueves, 28 de junio de 2012

Compañera de Viaje


Ella nunca viaja sola.

Siempre lo hace acompañada de su soledad.

Y a cada sitio al que llega: inventario de lo que cree llevar.

Infantilmente, casi siempre se olvida de contar  entre sus pertenencias,

 la sombra de su soledad.



No es que ella  a propósito  la busque.

Más bien al contrario, prefiere taparla de muchas maneras:

Con su sonora carcajada - risotada que enmascara los surcos que deja en la piel lo vivido-.

Con su desdeñoso comportamiento – triste disfraz de su alegría enlatada-



Se trata de un sutil pacto de convivencia concebido como inocuo

pero que hiere con la lentitud  con la que caen frías las gotas de agua

antes de desvanecerse en superficiales círculos

dentro de un profundo charco de lluvia.



Se trata de una herida abierta que proviene de antaño:

De cuando jugaba en el columpio

De la escalera a la que le faltaban peldaños

De la casa errante.



Prefiere mirarla de reojo, hacer que no está.

Prefiere avanzar vacilante, con aire despreocupado

Casi como flotando entre nubes.



La sonora carcajada

El flotar efímero entre nubes

El jamás mirar atrás, ignorando cualquier posibilidad de nostalgia.



Me pregunto, qué ocurrirá el día que su soledad se siente  frente a ella.

El día en que por fin se encuentren, cara a cara.

¿Sentirá ese día la losa pesada de la que tanto tiempo ha estado huyendo?


No hay comentarios:

Publicar un comentario